Semco y 10Pines, una historia de amor

Jorge nos cuenta por qué encontró a Ricardo Semler y a su empresa, Semco, como una gran fuente de inspiración.

Semco y 10Pines, una historia de amor

Allá, por el 2006, un compañero de la facultad me acercó un resumen de un libro que tenía algunas ideas “locas” sobre management de empresas. Como yo en ese momento era un estudiante de último año de Ingeniería, defensor de los desarrolladores y su rol protagónico, todo lo relacionado al management me sonaba a “humo” o estrategias de cómo exprimir a los empleados.

En el 2009 ya estaba cansado de pasar de empresa en empresa y sufrir siempre los mismos problemas: poca transparencia en el management generando desconfianza en los equipos, alta rotación, bajo compromiso y una consecuente baja calidad del producto construido. Por eso, en ese momento junto con Emilio Gutter, Alejandra Alfonso y Hernán Wilkinson pensamos en unir fuerzas para crear una empresa de desarrollo de software, donde apuntáramos a resolver esos problemas de raíz, usando como guía los principios y valores de la agilidad: colaboración, autogestión, transparencia e involucramiento.

Sorpresivamente, ese mismo año Emilio me compartió el mismo resumen que había llegado a mis manos en el 2006. Esta vez decidí prestarle atención. Buscaba inspiración para resolver los desafíos clásicos de liderar una empresa que estaban empezando a asomar, y por eso le di una nueva oportunidad. Ese documento era un resumen del  libro Maverick, de Ricardo Semler, CEO de Semco. En él se narra todo el recorrido, a lo largo de los años, por el que esta importante empresa industrial brasileña transformó radicalmente su organización, para alcanzar un estadio de organización colaborativa y transparente para sus integrantes. Las reflexiones y anécdotas del propio Ricardo, responsable inicial de este proceso transformador, ilustraban un camino recorrido, que, en el plano de los resultados económicos, implicó un cambio en la facturación, pasando de 4 millones de dólares en 1982 a 212 millones de dólares en 2003. Yo quedé enamorado de las ideas que se planteaban en el resumen del libro y de la visión de Ricardo. Cuando terminé de leerlo sabía que tenía que conseguir el libro y estudiarlo completo. Sonaba todo increíble, y por eso quería conocer los detalles.

Cuando por fin conseguí y leí el libro, entendí que esa era nuestra nueva brújula. Las ideas innovadoras y la lucidez con la que Ricardo describe los desafíos de las empresas y modelos tradicionales resonaban en mi mientras pasaba las páginas. No solo el modelo filosófico me resultaba coherente, la implementación que gestó con las prácticas que detalla en el texto me parecían increíbles. Prácticas como la definición de salarios por los mismos trabajadores, el reparto de ganancias con todos las personas que trabajan, la participación de los todo integrante colaborador en el proceso de recruiting, entre otras. Semco lograba bajar a implementación muchas de nuestras ideas abstractas. Fue para nosotros una fuente de inspiración y de acompañamiento. De inspiración porque tomamos muchas ideas y las remixamos para nuestra realidad. Y de acompañamiento porque nos hizo sentir menos solos, sentir que no éramos los únicos locos que veíamos que el modelo clásico no nos representaba.

Así fue cómo descubrí las primeras ideas de Ricardo Semler y su empresa, Semco.

Para mi, Semco fue una inspiración desde que 10Pines nació y Ricardo una guía (sin que él lo supiera). Encontramos en Semco el puente que unía nuestras ideas ágiles y el management. Es decir, al venir del mundo ágil, nuestra mentalidad estaba 100% alineada con buscar proyectos de desarrollo de software ágiles. Pero después de haber trabajado en muchos espacios antes de 10Pines, entendimos que si el management no acompañaba este mindset de agilidad, no podríamos tener mucho éxito. Comprendimos que existe un mismatch entre la agilidad y el management clásico, con lo cual no podíamos ser ágiles y tener una empresa con las prácticas de management tradicionales como tener un jefe, un organigrama, la lucha de poder por ocultación de información, la separación en departamentos, etc. Cuando conocí Semco entendí que era una gran forma de llevar el mindset de la agilidad, al management. Y, por eso, entendimos que era la mejor forma de gestionar la empresa: basándonos en la confianza, tomando decisiones de forma colaborativa, compartiendo la información y distribuyendo de una forma más justa las ganancias.

En ese momento Maverick era todo lo que había. Solo un libro, algunas charlas TED. De vez en cuando se publicaba algún nuevo video de Ricardo, o alguna nota, que devorábamos apenas nos llegaba.

Desde que descubrimos la historia de Semco, uno de nuestros grandes sueños fue conocer a Ricardo y trabajar con él y su empresa.  

En el 2018 me enteré de la creación de Semco Style Institute (SSI), una organización que había puesto en teoría la práctica y el caso Semco. Ricardo, junto a algunas personas más, creó un framework tratando de sintetizar el aprendizaje de Semco a lo largo de toda su vida, y compartirlo y contagiar otras empresas y cambiar el mundo del trabajo y la gestión empresarial. Esta organización estaba en Holanda, el material estaba principalmente en holandés y los cursos y charlas, también. Con lo cual quedé un poco triste porque las posibilidades de interactuar eran pocas. Sólo me quedó la esperanza de que en algún momento adoptarían el inglés como lengua secundaria.

Los caminos se siguieron cruzando como una premonición del futuro que nos uniría. En marzo del 2020 publicaron en el newsletter de SSI un post de 10Pines donde contaban cómo hacíamos recruiting. Ver que Semco hablaba de nosotros fue una hermosa caricia al alma. Nuestra inspiración ahora nos citaba como ejemplo!

Finalmente en junio del 2020, en medio de la pandemia, llegó el contacto definitivo: un mail a mi casilla que decía “Semco Style Consultancy Certification Program”. En ese momento supe que tenía que sumarme y terminar de estudiar lo que había comenzado hacía más de 10 años. Luego de varias conversaciones con Daphne (representante de SSI), conseguí inscribirme en el primer programa internacional que SSI hacía online. 4 meses después, estaba rindiendo mi examen de certificación, una evaluación autogestionada por los asistentes que me resultó una genialidad por la coherencia que tenía con lo que habíamos estudiado en el programa.

Para coronar este evento, llegó uno de los hitos que recuerdo con más emoción: como parte del programa tuvimos una sesión con Ricardo Semler para hacerle preguntas e intercambiar ideas en una charla en vivo.

No soy una persona que tenga héroes o idolatre personas. Tampoco, una persona que tenga el concepto de “sueño de mi vida”. La emoción que sentí significó que me estaba dando cuenta que podía lograr cosas que hasta ese momento creía muy difíciles, casi imposibles o muy distantes. Era sentir un reconocimiento al trabajo de años y una señal de “ok, completamos un capítulo”. Compartir una charla con él, ser parte de Semco, eran cosas que había imaginado por mucho tiempo, pero veía distantes, lejanos... Finalmente estaban pasando. No estaba cumpliendo el "sueño de mi vida"; estaba alcanzando un hito de mi vida, en el cual estaba haciendo cosas que creía casi imposibles, viviendo momentos que por mucho tiempo imaginé utópicos y conociendo de primera mano ideas, personas y organizaciones que fueron formando la persona que soy hoy.

Luego de esto, en el 2021, comenzamos lo inevitable. SSI y 10Pines tenían mucha afinidad en el trato. Había muy buena comunicación y nos entendíamos muy bien porque a pesar de tener idiomas nativos diferentes, hablábamos el mismo idioma humano: el de la colaboración y la confianza. Así surgieron nuestras primeras conversaciones para crear Semco Style Argentina. En junio del 2022 firmamos el partnership y así dimos comienzo a una formalidad que sentíamos desde que el resumen de Maverick tocó mis manos.

Hoy, 14 años después de haber escuchado las primeras ideas de Ricardo y enamorarme de Semco y su filosofía, estoy muy contento y emocionado de anunciarles que 10Pines va a estar representando a Semco Style Institute en Argentina. Creemos que compartimos el propósito, los valores, la práctica, el amor, la pasión y el esfuerzo de luchar por ver un mundo mejor, trabajando desde el impacto en las empresas y organizaciones.

Hoy, 14 años después de leer las primeras hojas de Maverick, 10Pines y Semco Style Institute se unen y dan nacimiento a Semco Style Argentina.

Ahora nos toca empezar un nuevo capítulo.

Hoy más que nunca, estamos listos para construir el futuro del trabajo, juntos.